España es uno de los principales lugares turísticos a nivel mundial. Además de por su variedad cultural, riqueza gastronómica y diversión, si por algo acuden más de 50 millones de turistas anualmente a España es por sus preciosas playas. Estos lugares concebidos como centros de ocio poseen características variadas. Algunos ejemplos: playas de arena blanca en la costa levantina; playas con agua turquesa en las Islas Baleares; tranquilidad en la costa Brava; grandes bancos de arena e intenso oleaje en las regiones cantábricas y atlánticas; etc.
Si algo es común en todo el litoral español, es la presencia en la gran mayoría de lugares de duchas, fuentes y lavapiés de Presto, ya que estos productos están pensados para funcionar en las condiciones más adversas, como son los entornos salinos y calcáreos que se dan junto al mar. Algunos ejemplos: Playa de Brazomar (Cantabria), Playas de Benidorm (Alicante), Playas de Puerto Banús (Málaga), Playa de El Prat de Llobregat (Barcelona), Playa de la Barceloneta (Barcelona); Playa d’en Bossa (Ibiza); Playa de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra); y un largo etcétera imposible de reproducir.